Fuente: chilecubica, en Obra Contratistas, 19.10.17
Existen diferentes tipos de pinturas que dependen de la superficie en la que se vayan aplicar y el uso que le vaya a dar, los distintos tipos de pintura que existen para interiores y exteriores tales como: en base al agua látex, en base al aceite óleos, barnices, esmaltes al agua , esmalte al aceite, lacas, colorantes, entonadores y selladores entre otros; cada uno con unas propiedades físicas y químicas que deben tenerse en cuenta a la hora de elegir el producto adecuado, ya sea por el tipo de superficie a aplicar, el carácter estético o las inclemencias a la que va a estar sometido.
Las más comunes y como una descripción general no técnica (ver PDF adjunto más específica y teórica) son las siguientes:
Pinturas al agua (látex).
Son resinas sintéticas disueltas en agua. Son aptas para usar en techos y paredes del interior porque cubren muy bien el color anterior.
Pinturas vinílicas.
Utiliza resinas vinílicas y sintéticas termoplásticas para aglutinar sus componentes. Son aptas para aplicar en exteriores por su resistencia a la intemperie, la niebla salina, los álcalis, los ácidos y la acción del sol. Poseen una oferta de tonos más amplia y al secar, adquiere un brillo característico.
Pinturas plásticas (Acrílicas).
Está compuesto de resinas vinílicas o acrílicas. Son aptas para ser aplicadas en interiores, son lavables, de secado rápido y con poco olor. Se utilizan sobre superficies de madera y hierro.
Pinturas al aceite (Óleo).
Utiliza aceites o resinas como medio para aglutinar sus componentes. Su secado es lento y se pueden usar para paredes y techos de interiores. Además, funcionan para maderas y acabados de muebles.
Pintura de esmalte al agua.
Incluye agua en su composición. Es de secado rápido y tiene gran facilidad de limpieza. No resiste tanta agua y la incidencia del sol por eso se recomienda solo para interiores. Sirve para aplicarse en maderas, paredes, etc. Pintura de esmalte sintético.
Se compone de resinas químicas y necesita de un disolvente para diluirse y limpiarse. Es recomendado para proteger metales y maderas. Este es el tipo de pintura que mejor conserva el brillo, incluso a la intemperie. El acabado es liso, con aspecto mate, satinado o brillante. Se utiliza mucho para proteger superficies de metal y de madera, tanto en el exterior como interior. Necesita de mucho tiempo de secado, pero es muy resistente. Barnices.
Sirven para superficies de madera nueva a la que no se desea dar color. También da vida a la madera desgastada por el uso. Tiene acabado transparente con tomos que imitan los colores de las distintas maderas. Pinturas vitrificantes.
Se utilizan para pintar suelos o escaleras porque tienen resistencia contra el desgaste.
Lacado
La superficie queda totalmente lisa y brillante. Es un tipo de pintura muy popular, sobre todo para pintar muebles, puertas, etc. Hay que saber utilizar bien esta técnica, ya que se dan varias capas de productos distintos y pueden surgir problemas de adherencia entre ellas, si no se aplican correctamente. A diferencia de los barnices, se usan para interiores.
Pinturas de imprimación.
Ayudan a dar una base a superficies vírgenes y preparadas para recibir la pintura definitiva. Cubren ligeras imperfecciones que pueda tener la superficie y otros colores antiguos. Pinturas antioxidantes Son especiales para superficies metálicas porque protegen contra el óxido. No necesitan removerlo ni diluirlo. Pinturas antihumedad Sirve para lugares que están expuestos a mucha humedad porque crean una barrera de impermeabilización. También, corrige las manchas de agua.
Pintura al cemento.
Es de aspecto mate y relativamente resistente al desgaste y a la erosión provocados por la lluvia, viento, etc. Se utiliza en el exterior, en superficies que deben ser rugosas para que se adhiera sin problemas. Se compran en polvo y se mezclan con agua, es importante aplicarlo justo después de mezclarlo con agua, ya que se endurecen rápidamente.
Pintura a la cal.
La gran ventaja de esta pintura, además de su bajo costo, es que debido a su alcalinidad tiende a destruir la materia orgánica, por lo tanto es útil para pintar habitaciones de casas abandonadas o que no se han usado por tiempo donde existe la presencia de insectos. Es antiséptica. No es adecuada para el exterior, pues, el agua de lluvia tiende a eliminarla aunque se le agreguen aditivos comúnmente llamados fijadores. Presenta también la gran ventaja adicional de permitir el pasaje de los vapores por eso es apta para ser usada en baños y cocinas, pues permite la "respiración" del paramento, disminuyendo así la posibilidad de formación de hongos (pues éstos se producen en ambientes anaeróbicos, es decir sin presencia de aire). Esa condición también hace que este tipo de pintura no se ampolle. De todas formas es una pintura de baja calidad, esto se nota por su aspecto, tienen la propiedad antiséptica de las pinturas a la cal. El aspecto es mate. No se debe emplear sobre yesos, maderas o metales. Hay que tener cuidado al usar este tipo de pintura, ya que es corrosiva, y puede quemar las manos.
Pinturas antihongos.
Son de tipo vinílico. Se utilizan para habitaciones que tienen mucha condensación de vapor como la cocina y el cuarto de baño.
Pinturas decorativas.
Para lograr un aspecto diferente, existen pinturas especiales que imitan el mármol o el estuco, o que semejan acabados antiguos, rústicos o multicolor. Pintura de emulsión reforzada Es una pintura especial para exteriores. Es soluble, con base de resina y si se mezcla con polvo de mica se obtiene un acabado texturado muy resistente a la intemperie.
Pinturas estructuradas.
Es un tipo de pintura espesa que con una sola pincelada puede pintar totalmente la cubierta. Se puede utilizar para recomponer paredes deterioradas y dan un acabado similar al del estucado con un relieve suave. Sin embargo, tenga en cuenta que todas las pinturas deben contar con estas cualidades: Buena resistencia a la intemperie y a la corrosión, buena adherencia al objeto, ser neutro respecto al soporte, estabilidad de color, buen rendimiento, decoración y ser dócil. Si no cuenta con estas características es mejor replantearse sobre cuál y qué marca es la indicada para el proyecto que vaya acorde con el presupuesto con el que se cuenta.
Las Pinturas con terminación Satinada y Brillantes son muy resistentes a la suciedad y ofrecen un acabado más fino y lustrosos.
La pintura plástica está disponible en acabado mate, satinado y brillante. El acabado mate es más económico, opaco y muy cubriente, por lo que resulta recomendable para paredes irregulares.
TÉCNICA DEL VETEADO....Fuente: Internet
Si está cansado de la apariencia de sus puertas, marcos de cuadros o de sus muebles, una forma de renovación es la técnica del veteado. Se describe como imitar las vetas de la madera en superficies de materiales poco nobles.
La forma más efectista de lograr el veteado se consigue dando primero una capa de pintura base ligeramente mate y después una capa de pintura de aceite satinado.
Es recomendable que la tonalidad de la pintura que queda encima sea más oscura que la de la primera mano.
Para aplicar la pintura base habrá que seguir el procedimiento normal con un rodillo de pelo corto en las superficies lisas y con pincel, de la forma más uniforme posible, en las zonas más complicadas. Una vez se haya secado la primera capa, habrá que dar la segunda mano. Cuando toda la superficie esté ya pintada del color oscuro, sin dejar secar, se pasará el veteador siempre en la misma dirección. Deberá continuar la veta con un peine de goma.
En la actualidad, se pueden adquirir veteadores que tengan por un lado el dibujo que simula los nudos de la madera, y por el otro lado el peine para continuar la veta.
Los colores más habituales para este procedimiento son el beige y el verde oliva. Si quiere utilizar pinturas mates y traslúcidas de determinados colores, deberá diluirlas en dos partes de aguarrás y una de aceite de linaza, y así se obtendrá un barniz veteado.
No habrá que dar una segunda capa de pintura cuando se utilice este procedimiento de pintado, ya que se borraría todo el efecto conseguido con el veteador. Como este procedimiento se puede utilizar par renovar los muebles antiguos, puede que algunos tengan capas anteriores de pintura o barniz.
Al vetear la superficie se darán dos manos de pintura -la primera como base y la segunda para el acabado-, por lo que habría que eliminar la pintura anterior que pudiese haber sobre la madera.
El veteado se puede aplicar en todo tipo de muebles, pero es común utilizarlo especialmente en mobiliario fabricado con maderas poco nobles. También es útil para la decoración de puertas, marcos de cuadros, zócalos, paredes de hormigón... y en general, cualquier superficie que soporte la pintura.